La nieve ha empezado a caer en San Sebastián desde primera hora de la mañana de forma intensa, lo que ha producido que la misma cuajara rapidamente.
Como suele suceder en estos casos, lo que para unos era una estampa bucólica que merecía ser fotografiada, para otros era un transtorno importante en los desplazamientos. Así el Paseo de la Concha se ha llenado de transeuntes que cámara en mano han inmortalizado cada copo que caía. Los niños y no tan niños, han disfrutado de lo lindo con las bolas de nieve por toda la ciudad.
Para más de uno era la primera vez que veían la nieve y enviaban sus fotografías a sus amigos y familiares del otro lado del mar.
Por su parte el Ayuntamiento se afanaba en que el servicio de autobuses funcionase al cien por cien, restableciendo la líneas más afectadas por la nieve.
En definitiva, San Sebastián estaba de postal y así la hemos fotografiado.
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