 La afluencia a la plaza fue muy numerosa, rondando el lleno. La expectación por ver a Hermoso de Mendoza y Cayetano grande, pero quien brilló fue Sebastián Castella, que cortó dos orejas.
Pablo Hermoso mató dos toros de Murube. El primero lo descabalgó en un percance raro, al que el rejoneador achaca al peralte de la plaza. El torero reaccionó a lo grande con dominio absoluto de la situación pero que no tuvieron premio.
Castella toreó a su dos Zalduendos con autoridad. Hizo muchas cosas y muchas bien, lo que le hizo ganarse a la plaza.
Cayetano tuvo dos novillos con clase que le dejaron trabajar y demostrar que lleva mucho toreo dentro. |
