A pesar de las previsiones metereológicas la ocupación hotelera era buena en la capital donostiarra. De hecho los hoteles han rondado el 80% de sus posibilidades, mientras que los hostales y pensiones han llenado practicamente.
Sin embargo, el tiempo ha sido más que desapacible. El frio y la lluvia han sido constantes y ello ha retraido a bastantes visitantes.
Y el mal tiempo no remite. De hecho se espera que en las próximas horas la cota de nieve descienda hasta los 300 metros, dejándonos una temperatura cercana a los 5 grados.
Una lástima para todos los que se han acercado hasta San Sebastián que no han podido disfrutar de la ciudad en su plenitud. Sin embargo la ciudad ofrece alternativas e incluso las inclemencias del tiempo se pueden convertir en un espectáculo digno de verse. Así, muchos visitantes se han acercado hasta el Paseo Nuevo donde saltaban las olas, aunque afortunadamente no con la violencia de hace unos días.
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