Ingredientes
2 kg. de mejillones.
2 dientes de ajo.
2 cucharadas de aceite de oliva.
Pimienta negra.
1 hoja de laurel y 1 limón.
La Preparación
Limpia bien los mejillones, arrancándoles las barbas
y las adherencias. Lávalos y déjalos escurrir.
Prepara una cazuela más bien honda, a ser posible de
barro. Introduce los mejillones, unos cuantos granos de pimienta,
la hoja de laurel y los dientes de ajo pelados y machacados.
Vierte el aceite y tapa. Acércala al fuego y déjala
unos 8 minutos, hasta que compruebes que los moluscos se han
abierto. Si alguno permanece cerrado, retíralo y no
lo aproveches, porque seguramente no estará en buenas
condiciones. Quita una de las valvas y deja el mejillón
unido a la otra. colócalos en una fuente honda y sírvelos
fríos o calientes, rociados con zumo de limón.
Recuerda
Los mejillones aportan ya la sal suficiente para cocinarlos.
Además de ser muy sabrosos, tienen un alto valor nutritivo,
sobre todo proteínico. Su contenido en grasas es bajo
y, por tanto, ¡no engordan! ¿Hay quien dé
más?